
La más reciente se llama Burn After Reading, y para mí es un ajedrez audiovisual en el que todos los personajes creen que ser el rey, pero en realidad son poco más que peones de un sistema que los lleva a espiarse unos a otros.
El laberíntico guión parece no tener ni pies ni cabeza, mezclando a lo loco muchos chantajes, agentes secretos, fitness, la C.I.A., los rusos, citas por internet, un hacha y una silla mecedora muy pertubantes. Si intentara describirles la trama entera los dejaría deprimidos, pero Burn After Reading es todo lo contrario, gracias a un trabajo actoral a "volumen 11" y a la mano firme de estos Coen. Una vez más sorprenden con su minimalismo estético y cero efectista, dejando que sea la propia historia, sin recursos ni aditivos pajeros, la que nos entretenga. Por momentos, parece un híbrido entre Tarantino y Seinfeld, pero no se equivoquen, esta punketada nihilista surca caminos que sólo los Coen saben hacer tan bien.

Hablando de actores, dudo que les pase desapercibida la siempre fiable Frances McDormand (atención a la escena con el cirujano plástico, todo un clásico instantáneo), o el eterno cabreado de John Malkovich, pasando por un genialmente idiota Brad Pitt, sin desmerecer a un actor que sale en miles de películas, pero que nunca podemos señalar por nombre una sola de ellas.


WORD!
ResponderBorrarlove & light
Fua que peli pa ser divertida!!! De pana que acertaste con la recomendación ;)
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